2.11.06
NAZARIO-PAKISTÁN Fotografías en Casa Asia
El admirado dibujante de comics y acuarelista hiperrealista Nazario, sevillano residente desde hace muchos años en Barcelona, ha expuesto en Casa Asia una serie de fotografías tomadas en su reciente viaje a Pakistán. De este viaje ha contado sus vivencias en dos extensos artículos aparecidos en el suplemento Culturas del periódico La Vanguardia. La exposición ya terminó pero aquí colgamos unas fotos del día de la inauguración. En la primera Nazario conversa con José María Martí, periodiata de El País y amigo suyo de muchos años. En la segunda el América Sánchez, premio nacional de diseño, observa muy atento una de las fotografías. En la tercera dos amigas, Anna y Carmita, posan ante dos relajantes imágenes de la arquitectura mogol de Lahore.
Las fotos de Nazario recogen tanto bulliciosas escenas callejeras, relajadas conversaciones de barbería, paisajes rurales con campesinos y animales, momentos de compañerismo en el patio interior de una casa, como retratos jugosos.
Recuerdo que Nazario publicó hace un par de años un interesantísimo libro cuyo título es "La Barcelona de los años 70 vista por Nazario y sus amigos" para el que recopiló fotografías inéditas de la movida barcelonesa de aquellos años y consiguió que decenas de amigos escribieran artículos comentando esas fotografías.
Nazario también ha escrito un entrañable libro sobre la Plaza Real, donde vive, y en el que aparecen descritos los variopintos personajes que rondan y hacen vida en esa popular plaza porticada contigua a las Ramblas.
23.10.06
Exposición de pinturas de Ernesto Carratalá Rey
23.9.06
El agua no se puede malgastar
El que está acostumbrado a vivir en zonas con escasez de agua no necesita que nadie le diga cómo se debe ahorrar. Lo lleva dentro. Su madre y su abuela ahorraban agua y sus vecinos también, y la siguen ahorrando. Pero uno se olvida pronto de las escaseces si se traslada a la gran ciudad de un país donde el despilfarro es la norma. Norma moderna de pocas décadas pues no hace tanto tiempo que se ha entrado en esa dinámica del gasto por el gasto. Simplemente porque uno se lo puede pagar. El grifo abierto mientras se lavan los platos, mientras se lavan los dientes. El váter se tira cada vez que se usa incluso si sólo se ha orinado. Me diréis que es de limpios el tirar cada vez el váter. Sí, lo es, y sería ideal hacerlo si estuviéramos en un planeta donde el agua fuera superabundante. Pero resulta que no lo es. Resulta que es el bien más escaso y más importante para la supervivencia del ser humano. Así que debemos empezar a saber ser limpios, limpísimos, sin malgastar. Una educación que se recibe desde el día en que se nace en muchos lugares del mundo.
22.9.06
BARCELONA ESTÁ DE FIESTAS
LOS CIELOS ESTÁN NUBOSOS, DICEN QUE LLOVERÁ. LOS GIGANTES Y LOS CABEZUDOS SE MOJARÁN Y LOS ANIMALES DE FUEGO DESPRENDERÁN CHISPAS A PESAR DEL AGUA. DESPUÉS SALDRÁ EL SOL.
¿CÓMO EXPLICAR A LAS MUJERES MAGREBÍES, PAKISTANÍES, INDIAS Y BANGLADESHÍES DEL RAVAL Y DE LA BARCELONETA, QUIÉN ES LA VIRGEN DE LA MERCÉ, ASÍ COMO LA DE MONTSERRAT, Y LA DEL CARMEN Y TANTAS OTRAS COMO TENEMOS POR AQUÍ.
- LA VIRGEN ES LA MADRE DE JESÚS.
- LA MADRE DE ISA, DICE UNA MAGREBÍ.
- HAY TANTAS VÍRGENES AQUÍ COMO DIOSAS HAY EN LA INDIA, DICE UNA HINDÚ.
- PERO AQUÍ TODAS LAS VÍRGENES SON EN REALIDAD LA MISMA, DICE TRINI.
- Y ALLÍ TAMBIÉN Y SI NO PIENSA EN KALI Y EN DURGA, UNA NEGRA Y OTRA BLANCA Y SIN EMBARGO LA MISMA: LA MADRE.
- COMO LA DE MONTSERRAT Y LA INMACULADA, UNA NEGRA Y LA OTRA
BLANQUÍSIMA, DICE LA SEÑORA JOSEFA DEL COLMADO.
ESTÁN CONVERSANDO FRENTE AL MAR MIENTRAS EN EL CIELO SE REUNEN LOS NUBARRONES.
¿LLOVERÁ?
¿NO LLOVERÁ?
¿SE MOJARÁN LOS CABEZUDOS?
¿CRITICARÁN EL PREGÓN?
¿QUÉ ES EL PREGÓN?
20.9.06
Ernesto Carratalá y sus calles de Calcuta
Aquí os mostramos los nuevos trabajos de Ernesto Carratalá, el histórico dibujante de El Víbora que ahora pinta unas telas extraordinarias. Este mundo abigarrado que podéis contemplar era la Calcuta de cuando él llegó allí en los setenta y sigue siendo la Calcuta actual, ya que poco ha cambiado en todo este tiempo.
Por los alrededores de Sudder Street vemos la tienda donde preparan y sirven los riquísimos lassis, los sastres, los rickshows tirados por hombres a pie, las vacas, los perros, los vendedores ambulantes, las mujeres atareadas, los niños, los tullidos siempre presentes en los dibujos de Carratalá, los autobuses repletos de gente, los motoristas, los policías, los sadus, los taxis.
Todo son detalles.
Se trata de obras que uno nunca acaba de abarcar, cada centímetro esconde sorpresas. Las ventanas de los edificios nos dejan intuír infinitos mundos distintos, cada una de ellas muestra en su interior lo que ocurre en aquella habitación remota y uno se puede imaginar facilmente a la familia que vive allí dentro, mujeres viendo la tele, peinándose, hablando con la vecina, contemplando la calle, vigilando desde la altura al niño al que ha mandado a por "rotis". Igual ocurre con las tiendas y chiringuitos, en su interior el que prepara y vende el "paan" o mezcla de especias envueltas en una hoja vegetal y que se guarda en la boca mientras se extraen sus jugos, el que elabora los pequeños puritos atrompetados tan típicos de la India donde los llaman "bidis", el sastre sentado en el suelo cosiendo con su máquina manual, las mujeres comprando saris porque se acerca una boda.
Los sikhs con sus turbantes característicos y sus barbas recogidas, siempre elegantes. Los árboles sagrados, con sus raíces brotando de las ramas y abrazando, retorcidas, anchísimos troncos. Las palmeras siempre presentes en Bengala así como las lagunas donde se bañan las mujeres, chapotean los niños, lavan los cacharros, se refrescan los búfalos y también los hombres. Los anuncios de las paredes, los posters de dioses y diosas en exposición y venta, los porteadores de grandes paquetes, los que arrastran carros enormes, los que exprimen la caña de azúcar y la venden en grandes vasos a los viandantes sedientos.
Los estampados de los saris de las mujeres, el cuadriculado del tejido de los "lunguis" con que los trabajadores musulmanes se envuelven de cintura para abajo y que anudan a su cintura, la diferente forma de los turbantes y la textura de las "gamjas" especie de toalla de tela de algodón y vivos colores que sirve para todo, secarse el sudor, limpiarse los mocos, atarlo a modo de cinturón o de turbante, bufanda si hace fresco...
¡Esta es la Calcuta de Ernesto Carratalá!
Si os interesa ver sus cuadros próximamente expondrá en la sala de exposiciones de la librería Bernat de la calle Londres de Barcelona. Octubre de 2006. Los cuadros tienen tamaños que van del pequeño al gran formato. También podéis dirigiros a él a través de este Blog Pasión Viajera.
30.8.06
Los que podemos viajar y los que no
Muchos somos los que tenemos el gusanillo de la pasión viajera inserto en lo más profundo de nuestro ser. Pasión viajera que nos llevará a otras tierras para conocer, disfrutar, observar, sentir, compartir, en fin, colmar nuestra infinita curiosidad por los paisajes y, sobre todo, por las gentes que viven en otros lugares del mundo. Somos muchos en todo el planeta Tierra. Sobre todo jóvenes, pero mayores también los hay, que desean con vehemencia poder salir de su casa, de su pueblo, de su ciudad, de su país, para recorrer el mundo, para ver otras caras, otras gentes, otras formas de montarse la vida. ¡Quién no ha deseado alguna vez salir a ver el mundo! Pero, y aquí quiero llegar, para poder recorrer el mundo y que te dejen cruzar fronteras no solo necesitas algo de dinero, sino que además debes pertenecer a un país con garantía de bienestar. Debes poseer un pasaporte que te permita cruzar muchas fronteras sin visado y que si se necesita visado te lo concedan con facilidad. A esa parte del mundo pertenezco yo, por eso he podido viajar y recorrer muchos países y por eso mismo tengo muchos amigos en diferentes lugares del mundo. Pero cuando quieren visitarme mis amigos , si proceden de ciertos lugares y hay continentes enteros cuyos habitantes están en esa situación, tienen que superar grandísimas dificultades y muchas veces no lo consiguen ni con mi ayuda.
27.6.06
Los árabes del mar
Presentación el jueves 29 de junio en la Librería Altaïr. Gran Vía 616. Barcelona. A las 19:30h.
Este es el nuevo libro que acaba de publicar el fotógrafo, escritor y viajero, Jordi Esteva. Todavía no lo he leído. Espero hacerlo en el vuelo a Bombay, después de la presentación, para poder comentároslo dentro de algunas semanas. pero, de momento, ahí va lo que el mismo autor nos cuenta:
"Tras cuatro años de trabajo intenso, estoy contento de anunciaros la presentación de mi libro sobre Los árabes del mar. Un libro de viajes, en el que no he querido incluir fotografías. El relato es la búsqueda de un mundo que ya se ha ido. El de los navegantes árabes que en sus veleros o dhows impulsados por los monzones recorrían los puertos del Índico. Aquel mundo desapareció, hacia la década de los sesenta del siglo XX. “Pero en algún lugar de las costas de Arabia, de Mombasa o Zanzíbar, me decía, encontraré ancianos capitanes con historias que ya nadie quiere escuchar”. A principios de siglo XXI, partí en su búsqueda, para la que conté con la ayuda del sultanato de Omán. Recorrí los puertos de aquel país encontrando antiguos capitanes y mercaderes. También Mombasa, Lamu, Quiloa o los antiguos sultanatos de Pate y Zanzíbar... para redescubrir una historia antigua y olvidada. Estoy contento de mostraros el resultado. ¿Queréis viajar conmigo?"
www.jordiesteva.com
www.jordiesteva.com
25.6.06
Ernesto Carratalá Rey presenta sus últimos cuadros
Carratalá Rey, como firma Ernesto sus cuadros, acaba de presentar en una tetería de la calle Sant Domènec del Call de Barcelona sus últimos trabajos. Si hasta ahora eran calles y gentes de la India o de Filipinas, lugares donde había vivido muchos años, los que aparecían siempre en su obra, ya fuera plumilla, gouache u óleo, ahora sus ambientes se han extendido hasta el barrio del Raval de Barcelona donde los inmigrantes son mayoría.
Aquí podéis ver cuatro cuadros. Los dos primeros forman parte de la serie "Inmigrantes" con mujeres y niños procedentes de todos los países, rumanas e indias y pakistaníes se juntan con senegalesas y bolivianas y hasta se les añade un perrito faldero, detrás un decorado con un gran buda verde y un indio americano y sus plumas.
Siempre hay un toque de humor en los cuadros de Carratalá.
Los otros dos representan, el primero, una escena de calle en Manila donde un policía está regulando el tráfico, y el segundo un alto en el camino de una familia india que que toma el té sobre la hierba mientras el conductor de un "ambassador" blanco, el coche típico de la India, conversa animadamente con un sikh que luce un turbante fucsia.
Siempre escenas de calle, abigarrada vida de barrio, crónica en dibujo de lugares tan distintos como Manila, Calcuta o Barcelona.
Este fantástico pintor cuya obra se remonta a los años setenta, cuando empezó a publicar en El Víbora, ha ido evolucionando desde la pluma en tinta china negra hasta los más intensos colores en gouache, pero su obra sigue siendo fiel a los lugares donde ha vivido y a sus gentes y sus cuadros representan, gracias a la fina capacidad de observación del artista, una crónica social de las más diversas comunidades.
Aquí podéis ver cuatro cuadros. Los dos primeros forman parte de la serie "Inmigrantes" con mujeres y niños procedentes de todos los países, rumanas e indias y pakistaníes se juntan con senegalesas y bolivianas y hasta se les añade un perrito faldero, detrás un decorado con un gran buda verde y un indio americano y sus plumas.
Siempre hay un toque de humor en los cuadros de Carratalá.
Los otros dos representan, el primero, una escena de calle en Manila donde un policía está regulando el tráfico, y el segundo un alto en el camino de una familia india que que toma el té sobre la hierba mientras el conductor de un "ambassador" blanco, el coche típico de la India, conversa animadamente con un sikh que luce un turbante fucsia.
Siempre escenas de calle, abigarrada vida de barrio, crónica en dibujo de lugares tan distintos como Manila, Calcuta o Barcelona.
Este fantástico pintor cuya obra se remonta a los años setenta, cuando empezó a publicar en El Víbora, ha ido evolucionando desde la pluma en tinta china negra hasta los más intensos colores en gouache, pero su obra sigue siendo fiel a los lugares donde ha vivido y a sus gentes y sus cuadros representan, gracias a la fina capacidad de observación del artista, una crónica social de las más diversas comunidades.
18.6.06
¡Esto es Calcuta!
Un libro excepcional para quien quiera viajar a Calcuta, capital del estado de Bengala Occidental en la India, o para quien quiera simplemente saber más sobre este extraordinario país que es la India, o para quien desee pasar un entretenido, interesante y fascinante rato de lectura. Se lee como una novela, si lo empiezas no lo dejarás hasta el final.
¡Esto es Calcuta! (Ediciones B, finalista del Premio Grandes Viajeros 2005) es mucho más que un libro de viajes. Es la historia que parece de novela pero es real, de una familia bengalí que vive en los alrededores del New Market. También es la historia de Calcuta, la que fuera capital del Raj, y cuyo renacimiento cultural junto con su riqueza, la llevó a ser la ciudad más importante del Imperio Británico después de Londres. Con más de mil millones de habitantes y con una democracia ya consolidada, lo cual no evita que algo menos de la mitad de su población sea analfabeta ni impide que alrededor de setecientos millones supongan un gran mercado lector potencial, en la India conviven la opulencia y la miseria o la ignorancia y la brillantez cultural como en ninguna otra parte, plasmada la última de ellas en la obtención de varios premios Nobel como Ronald Ross, Amartya Sen o Tagore. Y ese contraste jalona este libro de forma permanente, constante, que se manifiesta rotunda en lo referente a Calcuta, donde si la miseria, la muerte, la inseguridad o el dolor forman un nido tenebroso, también lo constituyen la abundancia, el bullicio, la religiosidad o el estudio. Sobre este cañamazo, alternando su historia secular con la íntima de una familia bengalí y la de la autora misma, se nos ofrece un panorama vivo de la urbe india con una peculiaridad destacable, ésa que a decir de Stevenson es la única para que un escritor resulte inteligente: la precisión y el detalle. La autora de este libro es una gran observadora y sus reflexiones sobre el terreno nos hacen sentir cómo palpita la sociedad bengalí. El libro lo dedica a su madre, antigua maestra y admiradora de Rabindranath Tagore, que con 86 viajó con ella a Calcuta y pasó una temporada en el piso que tenía alquilado en el barrio de Rabindra Sarobar, sus comentarios en la tercera parte del libro son una delicia.
Sobre la autora: Ana Mª Briongos es licenciada en físicas y fue alumna de lengua y literatura persa en la Universidad de Teherán. Vivió y trabajó en Irán y en Afganistán y ahora vive en Barcelona. Sus libros sobre Irán ("Negro sobre negro" Ed. Laertes, "La cueva de Alí Babá, Irán día a día", ed. Lumen) y sobre Afganistán ("Un invierno en Kandahar" ed. Laertes), son ya libros de culto en el mundillo viajero y han sido traducidos a varios idiomas.
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